UN SITIO PARA AMANTES DE LOS COMICS

martes, 22 de diciembre de 2015

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Batman, un juramento desde la tumba. Los comics de superhéroes que amo (4) y Antología del comic breve (19)


De todas las historias de Batman de los 70 A vow from the grave es la que la mayoría de aficionados recordamos con mayor detalle y emoción. 
Se trata de un relato breve de 15 páginas que narra la persecución que Batman emprende en una noche tormentosa para atrapar a un criminal llamado Kano Wiggins. Durante esta carrera desenfrenada los dos contendientes se encuentran con una troupe de fenómenos de circo que acampan en un casa abandonada en medio de las montañas. Se produce un asesinato y Batman deberá resolverlo.


Tras esta simple premisa argumental el guionista Dennis O'Neil escribe un relato emocionante y sentido donde cobran protagonismo los integrantes del circo que se muestran más humanos que el fugitivo Wiggins o que el propio Batman.
O'Neil rinde un obvio homenaje a la película Freaks (La parada de los monstruos) de Tod Browning realizada en 1932 y que en los años 60 volvió a las pantallas adquiriendo rango de film de culto entre los aficionados e intelectuales más beatniks.


Neal Adams, realiza un trabajo artístico impecable, condensando la trama en 15 páginas, dándole un ritmo endiablado y aun así dotando de humanidad a cada uno de los personajes implicados en esta historia. Uno no puede evitar viendo estas páginas, recordar a otros "freaks" del comic como son los mutantes que forman La Patrulla X que Adams había realizado un año antes.

Todo el relato está impregnado de una atmósfera decadente y triste pero al mismo tiempo destila una humanidad y filantropía difícilmente presente en la mayoría de historias de la época.
Un juramento desde la tumba se convierte así en un episodio que influirá de manera casi imperceptible pero poderosa en las futuras encarnaciones de Batman. Es una historia única que se convierte en otro de estos comics de superhéroes que amamos.


A vow from the grave se publicó en el Detective Comics # 410 correspondiente al mes de abril de 1971. En España ha tenido varias publicaciones, entre otras en 1979 está incluido en el # 4 de la colección Batman de la Editorial Bruguera. También se puede encontrar en el # 2 de Batman, justicia ciega editado por Zinco en 1989 y en numerosos recopilatorios.
Os dejo con esta maravillosa historia titulada Batman, un juramento desde la tumba con guión de Dennis O'Neil, dibujos de Neal Adams y acabados de Dick Giordano. Que la disfrutéis.

















Salut!

lunes, 16 de noviembre de 2015

Je suis parisien...

...et citoyen du monde.


Jacques Tardi.






Frank Robbins.




Enki Bilal.






Jean-Claude Mézières.




(...) la Tour Eiffel a froid aux pieds
l'Arc de Triomphe est ranimé
et l'Obélisque est bien dressé  
entre la nuit et la journée

Il est cinq heures 
Paris s'eveille
Paris s'eveille

Les journaux sont imprimés
les ouvriers sont deprimés
les gent se lévent, ils sont brimés
c'est l'heure ou je vais me coucher

Il est cinq heures 
Paris se léve
Il est cinq heures
je n'ai pas sommeil

(Il est cinq heures, Paris s'eveille.  Jacques Dutronc)


Hoy más que nunca; Salut! y tengan cuidado ahí fuera.

jueves, 5 de noviembre de 2015

Fell. Un policíaco existencialista



¿Que tiene Fell que lo destaque de la media, incluso de la media de comics escritos por Warren Ellis? Simplemente que es un buen comic.
Con esto no quiero decir que Ellis escriba malos comics. No. A menudo acierta. Adoro Planetary; me parece una serie maravillosa, única y gran parte del mérito es del guionista. Admiro The Authority donde demostró que se podían hacer comics de superhéroes amenos, modernos e inteligentes y también me divirtió mucho Transmetropolitan pero sus comics más recientes... Eso ya es otra cosa.


Sin embargo Fell es bueno. Es un policíaco interesante, con tramas bien estructuradas y personajes bien definidos que penan por un escenario tan deprimente como atractivo.
Está dibujado por Ben Templesmith que hace un trabajo eficaz y original adaptándose con su estilo expresionista a las exigencias del escritor, Warren Ellis, que buscó llenar las páginas de esta serie de una estructura narrativa férrea y más densa que la de los comic books actuales. Son 16 páginas por episodio con un caso resuelto en cada uno de ellos y son 9 capítulos publicados de los que en España se conocen 8 incluidos en un álbum editado por Norma el año 2008 y titulado Fell: Ciudad Salvaje.


Más recuerdos desde otra ciudad sombría.

Fell explica los casos de un policia, Richard Fell, destinado al siniestro distrito de Snowtown de una ciudad sin nombre. En este distrito - una ciudad entera de hecho - mora una comisaría donde trabajan el quejica teniente Beard, su neurótica secretaria y tres detectives y medio. Ahora uno de ellos es Richard Fell que desde el inicio demuestra que es un buen policía y también que oculta oscuras razones por las que ha sido trasladado a Snowtown. En el pasado de este detective de homicidios hay dos sucesos no explicados que son la causa de este destino provisional al otro lado del puente.


La ciudad de Snowtown con la eterna neblina que la envuelve se erige en la protagonista absoluta de las historias. Sus calles sucias y desiertas, los muros llenos de pintadas con una s roja tachada, la sensación de peligro que las invaden y el acentuado aspecto de pobreza y abandono son algo más que un decorado; definen el estilo y el tono de una serie que nos va desvelando al mismo tiempo que a su protagonista la fauna que las habita. Perdedores llenos de resentimiento y predadores sin escrúpulos.


En este ambiente de precariedad y neurosis Fell intenta resolver sus casos demostrando grandes aptitudes detectivescas y al mismo tiempo preocupantes debilidades de carácter que le llevan a tomarse ciertas licencias legales para atrapar al culpable y que le llevan incluso a cometer graves errores que paga muy caro. Sin embargo su labor se revela titánica en este ambiente decadente, depresivo y lleno de autocompasión.
Para ello Warren Ellis se fija en historias mínimas pero de gran carga emocional que se pueden encontrar en los breves de cualquier diario de cualquier ciudad. Historias que nos dibujan una sociedad enferma donde las personas no escuchan ni son escuchadas por sus semejantes ni tampoco por sus allegados. Algunas de estas personas resuelven sus conflictos internos mediante el crimen. Otras son víctimas que se lamentan sin que nadie parezca escucharlas. Sólo Richard Fell parece saber descifrar estas súplicas pero casi siempre es demasiado tarde.


Otro punto fuerte de esta serie inacabada son sus personajes secundarios. Por las páginas de Fell deambulan un catálogo inigualable de psicópatas, egocéntricos e inadaptados que reflejan con brutal lucidez la máquina de triturar personas en que se ha convertido la sociedad actual.
Frente a este caos emocional la relación entre Richard Fell y Mayko se revela como un oasis de ternura y esperanza que despierta una sonrisa en el atribulado lector. Y es que Mayko es un personaje de los que dejan huella; literalmente se te queda grabada en la piel...
Tenemos a demás los componentes de la Comisaría de la calle Luna a cual más patético, a los criminales que atrapa Fell a cual más desequilibrado y a la monja bajita con careta de Richard Nixon que no sabemos nunca que trama pero que seguro que algo gordo esta tramando.


El ejemplo de los maestros.

Para realizar esta serie Warren Ellis se obligó a seguir una estructura de página férrea. Quería llenar de contenido cada historia, condensar al máximo sus tramas y eliminar lo superfluo. Para ello se marcó una división de la página en 9 viñetas que se rompería esporádicamente y tan solo a beneficio de la acción. Esta estructura, usada en series como Bogey o Watchmen, marca un ritmo de lectura sostenido que beneficia la fluidez del relato. Ellis reconoce además que para adaptarse a la extensión de 16 páginas se estudió con detenimiento la serie The Spirit de Will Eisner y equipo.


El arte de Ben Templesmith  se somete a las necesidades del guionista y no dificulta la lectura de las historias. Su mayor rasgo estilístico es el impecable uso narrativo del color que dota a cada secuencia de un tono perfectamente estudiado para acentuar la acción. Su trabajo con los personajes es modélico y la descripción de la ciudad de Snowtown, perfecta de tal manera que parece que estemos deambulando por sus gélidas calles cada vez que pasamos la vista por una de las páginas.


Fell es un policíaco diferente. Un comic negro de personajes y de ambientes que esconde en su núcleo una desesperanzada pero tierna visión del ser humano y es además un excelente retrato de un policía íntegro pero falible que oculta un secreto que quizás nunca podamos descubrir.
Alack Sinner, Bogey y Sam Pezzo sonríen porque tienen otro amigo en las calles. Evaristo, Jim Gordon y el teniente Dante ya pueden respirar tranquilos porque a Snowtown ha llegado un poli de verdad; tal y como dicen en la serie The Wire: "a real police".


Salut!

jueves, 24 de septiembre de 2015

Tres perlas otoñales por venir... y un truño


Se presenta una vuelta de las vacaciones apasionante. Están anunciadas tres novedades que me ilusionan como hace tiempo no lo hacía ningún estreno. Son tres reediciones de material extraordinario y muy difícil de encontrar en castellano. Estoy hablando de Zanardi de Andrea Pazienza que publicará Fulgencio PimentelBlanco Humano de Peter Milligan con varios dibujantes por ECC y El Cid de Antonio Hernández Palacios publicado por Ponent Mon.


La primera novedad es una sorpresa enorme - de hecho las tres los son en cierta medida - y también una alegría extraordinaria.
Andrea Pazienza fue un autor fundamental en la década de los 80 en la que publicó una obra intensa y apasionante hasta su muerte por sobredosis de heroína en 1988. Zanardi, aquí menos desconocida como La Pandilla, es una de sus series más regulares y describe las amorales desventuras de un trio de jóvenes cínicos y nihilistas en medio de un ambiente burgués de ciudad de provincias.


La impresionante versatilidad del estilo de Pazienza queda demostrada en esta serie donde, por exigencias del guión, el artista italiano pasa de un hiperrealismo feroz a la caricatura más descarnada enriqueciendo sus páginas con matices artísticos y narrativos únicos y originales.
Su influencia ha sido palpable en generaciones posteriores de creadores europeos convirtiéndose en un referente, casi tanto como Alex Toth lo fue a su vez para los artistas de los Estados Unidos. A poco que la edición esté cuidada es una de las novedades del año, sin duda.


El Cid de Antonio H. Palacios es un exceso hecho comic. Es una obra casi arquitectónica, casi escultórica más que dibujada. Palacios rescata la leyenda del caballero Rodrigo Díaz de Vivar de las garras retóricas del franquismo para construir un personaje luchador y rebelde que batalla por su supervivencia. El autor quería continuar con la serie ya que los cuatro tomos publicados solo abarcan la juventud del personaje pero las dificultades económicas del proyecto acabaron pesando más que su fabulosa importancia artística e histórica.
Ponent Mon lanzará pronto este integral donde incluirá los cuatro tomos de la serie titulados en su momento como: Sancho de Castilla, Las Cortes de León, La Toma de Coimbra y La Cruzada de Barbastro. Esperemos que la edición esté a la altura de la enorme importancia de la obra.


Blanco Humano es un artificio pulp que, gracias al extraordinario guionista inglés Peter Milligan, trasciende su origen para convertirse en una apasionante reflexión sobre la identidad y también en una ácida y descarnada descripción de la sociedad norteamericana post atentado a las Torres Gemelas de Nueva York. Milligan describe universos poco explotados en la ficción yanqui como el doping en el deporte, los grupúsculos de extrema izquierda norteamericanos de las décadas de los 60 y 70 o el tráfico ilegal de niños inmigrantes para ser prostituidos. Blanco Humano es un salvaje baño de realidad al mito del american way of life.


La nómina de artistas que participan en esta etapa de la serie es espectacular. Abre fuego Edvin Biukovic que realiza uno de los mejores trabajos de su corta vida llenando sus páginas de contundencia, elegancia y espectacularidad. Javier Pulido se sale ilustrando y narrando la novela gráfica Final Cut y luego iniciando la serie regular y finalmente Cliff Chiang no desentona en absoluto algo que, teniendo en cuenta el nivel anterior, no debió de ser nada fácil de conseguir. Pueden ser cuatro tomos memorables.


¿Y el truño? Aquí os dejo una muestra del arte de John Buscema y La Tribu para que la comparéis con la misma página publicada en la nueva la edición de Planeta DeAgostini... Lamentable su coleccionable.


Salut!

ACTUALIZACIÓN:  (29/09/2015)

Una vez comprado el álbum de Zanardi estoy algo decepcionado. El material es excelente pero la edición no. Los negros están empastados seguramente por culpa del tipo de papel usado. En las historias en blanco y negro no es grave pero en cambio en la historia a color, Noche de Carnaval, queda todo emborronado. Una auténtica lástima.

Salut!